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Espuma de baño de cerveza 200 ml (vaso)

La espuma de cerveza relajante tiene un alto contenido de cerveza y vitaminas del grupo B, regenera la piel, tiene efectos relajantes y calmantes. Nuestra receta aprovecha los efectos beneficiosos de la levadura de cerveza sobre la piel, siguiendo el ejemplo de los modernos baños de cerveza. La combinación de extracto de levadura de cerveza y extracto de lúpulo tiene excelentes efectos hidratantes, antisépticos y ligeramente cicatrizantes y antiinflamatorios. Aporta a la fórmula proteínas, lipoides, vitaminas y muchas otras sustancias beneficiosas para la piel. Contiene glicerina, que suaviza la piel. Un baño de 15 minutos relajará milagrosamente los músculos tensos y aliviará la sensación de tirantez. Es adecuado para el uso diario. Los ingredientes de cuidado de alta calidad, el pH equilibrado y una eficaz combinación de extractos garantizan un cuidado perfecto y suave, al tiempo que preservan la película protectora natural de la piel y su hidratación.

590 CZK / 26 EUR

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Espuma de baño de cerveza 200 ml (vaso)

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Historia de los baños de cerveza

El baňo de cerveza como tal se explotaba hace 4.000 años en la India. Los antiguos chinos y egipcios también conocían los efectos beneficiosos de las hierbas sobre el cuerpo humano. La historia de la producción de cerveza se remonta al séptimo milenio antes de Cristo, cuando los antiguos sumerios la descubrieron, probablemente por error. Extraviaron el grano que cultivaban y se inventó el principio de la fermentación.

La relación entre la cerveza y los baños se conoce oficialmente desde la Edad Media, cuando se estableció el conocimiento de los efectos beneficiosos de los baños de cerveza a partir de las fuentes. En esta época ya se habían descubierto los efectos preventivos de los baños de cerveza y los baños de cerveza.

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Historia de la producción
y malta

La historia de la producción de cerveza se remonta al VII milenio a.C., cuando fue descubierta, de forma un tanto accidental, por los antiguos sumerios. El método de fabricación de la cerveza comenzó con el mal almacenamiento del grano que cultivaban. El grano se almacenaba en vasijas de barro en las que se vertía agua, y así se descubrió el principio de la fermentación.

El proceso de producción ha permanecido inalterado durante siglos: todo comienza con la molienda de la malta y la posterior elaboración de la cerveza. A continuación, se enfría el mosto y se utiliza levadura multiplicada, seguida de la fermentación principal. Este producto semiacabado se coloca en tanques de cerveza, donde la cerveza reposa y madura. Tras el reposo y la maduración, la cerveza se somete a un filtrado microbiológico y de sílex. Aquí es donde todos los amantes de la cerveza se alegran, porque después de estos procedimientos la cerveza se embotella y se despacha.

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